"Debes
buscar personas y lugares en los que tu verdad sea dicha, y donde se te
recuerde tu identidad más profunda como elegido de Dios. Sí, debemos optar
conscientemente por nuestra condición de elegidos, y no permitir que nuestras
emociones, sentimientos o pasiones nos seduzcan y nos lleven al
auto-menosprecio. Las sinagogas, las iglesias, muchas comunidades de fe, los
diferentes grupos de apoyo que nos ayudan en nuestros momentos de debilidad,
como son la familia, los amigos, los profesores, los estudiantes, todos ellos
pueden convertirse en personas que nos recuerden nuestra verdad. El amor
limitado, a veces roto, de los que comparten nuestra condición humana, es capaz,
a menudo, de orientarnos hacía la verdad de lo que somos: preciosos a los ojos
de Dios. Esta verdad no brota simplemente del centro de nuestro ser. Ha sido
revelada también por el Uno que nos ha elegido. Por eso debemos estar atentos
y a la escucha de muchos hombres y mujeres a lo largo de la historia. A través
de sus palabras y de sus vidas nos invitan a volver al corazón de esa verdad".
Henri NOUWEN
Uno de mis primeros libros de HN. Lo regalé hace unos años a alguien que le vendría bien,,,Que ganas de volverlo a leer! (creo que me lo voy a volver a comprar)
ResponderEliminarMe encantó este texto especialmente, muy en sintonía con mi alma ahora. Gracias Manuel.