miércoles, 25 de mayo de 2016

¿QUIEN ESCUCHA AL QUE SUFRE?

"En la vida espiritual, escuchar es mucho más  que una simple estrategia psicológica para ayudar a los demás a descubrirse a sí mismos. En la vida espiritual, quien escucha no es el yo, al que en realidad lo que le gustaría es hablar,(pero que está entrenado para contenerse), sino el Espíritu de Dios que está en nuestro interior. Cuando hemos recibido el Espíritu (o sea, el Espíritu de Jesús como aliento de Dios que alienta en nosotros), ese Espíritu crea en nosotros un lugar sagrado donde podemos recibir a los demás y escucharlos.
El Espíritu de Jesús ora en nosotros y escucha en nosotros a todos aquellos que vienen a nosotros con sus tribulaciones y sufrimientos.
Si nos atrevemos a confiar plenamente en el poder del Espíritu de Dios que escucha en nosotros, veremos producirse verdaderas sanaciones."

HENRI NOUWEN

lunes, 16 de mayo de 2016

SÉ TU MISMO.

"A menudo queremos... ser otro distinto del que somos. Tendemos a compararnos permanentemente con los demás y nos preguntamos por qué no somos tan ricos, tan inteligentes, tan sencillos, tan generosos o tan santos como ellos. Estas comparaciones nos hacen sentir culpables, avergonzados o celosos. Resulta sumamente importante darse cuenta de que nuestra vocación está oculta allí donde estamos y en aquello que somos. Somos seres humanos únicos cada uno con un llamamiento en la vida, al que debemos responder. Nadie mas puede llevarlo a cabo. Y hemos de responder a ese llamamiento en el contexto concreto del aquí y ahora. 
No encontraremos nunca nuestra vocación tratando de pensar que somos mejores o peores que otros. Somos lo bastante buenos como para hacer lo que estamos llamados a ser. ¡Sé tú mismo! "

HENRI NOUWEN

lunes, 9 de mayo de 2016

NUESTRA PROPIA ASCENSIÓN.

"Jesús nos enseña cómo vivir en el tiempo presente. Identifica nuestro tiempo presente con el fin de los tiempos, el tiempo que nos brinda mil oportunidades para dar testimonio de Jesús y de su Reino. Los muchos desastres de nuestro mundo y las tragedias que les suceden a las gentes a diario pueden llevarnos fácilmente a la desesperanza y convencernos de que somos las tristes víctimas de las circunstancias. Pero Jesús ve estas circunstancias de una manera radicalmente distinta. Él las llama oportunidades de dar testimonio.

Jesús nos recuerda que no pertenecemos a este mundo. Hemos sido enviados para ser testigos vivientes del amor incondicional de Dios, haciendo un llamamiento a todos de mirar más allá de las realidades pasajeras de nuestra existencia temporal hacia la vida eterna que nos ha sido prometida" 

HENRI NOUWEN